Joaquín “Pani” Paniego y Santiago “Banti” Baravalle provienen de géneros ajenos a la música electrónica. Juntos componen el dúo que se inicio durante la pandemia, con base en el live looping y los instrumentos tradicionales, y que presenta una propuesta auténtica exploración y experimentación .
El contexto de pandemia ha pegado de diferentes formas en toda la población mundial. En el caso de “Pani” y “Banti” les dio el tiempo y quizás tranquilidad para desarrollar sus habilidades musicales y capacidad de exploración por lo que aprovecharon las posibilidades que brinda en ese aspecto la música electrónica.
Ambos son productores en diferentes géneros, formaron parte desde 2014 de la banda de reggae local “Nuna Malta” y desde 2018 desarrollaron su carrera solista. “Banti” toca el piano, tiene un disco solista de world music y “Pani” es multi instrumentista más asociado a la escena del rap. Esa trayectoria y el vínculo que poseen les permitió embarcarse en un nuevo proyecto que en sus primeras presentaciones ya logró conectarse con el público.
Sin encasillarse en géneros, Candy Flux desarrolla a través del live set presentaciones improvisadas pero guiadas. Tal vez por eso logran un vínculo inmediato con el público a través de un viaje musical capaz de llevarnos desde el “house” hasta el “techno” pasando por un poco de progressive de manera muy natural y fluida.
El live set no es una novedad, sin embargo este dúo local posee la cualidad de mezclar las luces de dos formas de producción musical, por medio de una artesanía compuesta por espontaneidad y conocimiento. Como exploradores que saben incursionar, se meten en un mar de sonidos en el que controlan el ritmo de un set a través de los kicks y synthes propios de la electrónica con lo humanamente armónico de los instrumentos clásicos.
Es grato y saludable para la escena electrónica que surjan proyectos como Candy Flux, por eso nos contactamos con “Pani” y “Banti” para una mini entrevista y que nos cuenten más.
– Ambos provienen de otros géneros o ramas musicales, ¿por qué eligieron la música electrónica? ¿Qué encontraron en el género que los atrajo?
– Como músicos y productores consideramos fundamental estar abierto y experimentar ya sea escuchando, creando o interpretando una variedad amplia de géneros musicales. Es algo que te nutre y te hace crecer.
La atracción por la música electrónica nace a mediados del 2019, durante nuestra estadía en Tulum-México a partir de una necesidad laboral. Por allá estaba muy latente el live set y las sonoridades electrónicas en su variedad de formatos y por eso decidimos experimentar un live set donde la base rítmica y algunos otros elementos sean de la música electrónica pero combinado con instrumentos más orgánicos tocados en vivo como guitarras, voces, trompeta, saxo, etc. Nos llamó mucho la atención y al mismo tiempo nos motivó la buena respuesta de la gente en nuestra primera presentación en vivo.
Durante la pandemia decidimos convivir 2 meses con Pani para poder profundizar más en este género, lo que nos llevó a investigar y estudiar los distintos sub-géneros de música electrónica y los recursos que le daban identidad a cada uno. También destinamos mucho tiempo a diseñar la manera en la cual podíamos recrear estos estilos en vivo tocando y grabandonos en tiempo real.
Sin dudas lo que más nos atrajo de este género (y sobre todo de que sea un live set) fue la posibilidad de combinar la sonoridad electrónica con la energía de estar tocando en vivo como si fuese en una banda. Nos atrajo lo divertido que era la experiencia de tocar y la libertad de poder improvisar y llegar a lugares impensados. Cada toque es único.
– ¿Qué opinan y cómo influye en ustedes el prejuicio que existe sobre la música electrónica desde un sector de la música tocada con instrumentos tradicionales o convencionales?
– Sinceramente no nos interesan los prejuicios que pueda tener la gente sobre este género. Creemos que todas las maneras de hacer música son válidas si uno lo hace con amor y convicción, sabiendo que tiene algo para aportar. Me parece que el Live Set y la idea de combinar instrumentos tocados en vivo con música electrónica es algo cada vez más común y que de alguna manera está renovando y aportando algo nuevo y diferente al género en sí.
– ¿Tienen referentes en el estilo que llevan a cabo?
– Tenemos muchos referentes y variados. Los que hemos escuchado más últimamente: Giorgia Angiuli, Sebastien Leger, Nick Warren, Ben Bohmer, Carl Cox, Black Coffe, Disclosure, Michael Bibi, Skrillex, Boris Brejcha, Nicola Cruz, Chancha vía circuito, Dusty Kid, Ivan Aliaga, Luuk van Dijk, Daft Punk, Gorillaz, Green Velvet, etc.
– ¿Cómo fueron las primeras presentaciones y como se ven a futuro?
– Nuestras primeras presentaciones fueron muy gratas. Nos hemos sentido muy cómodos y siempre ha habido muy buena respuesta por parte de la gente. Eso es lo más importante para mi. Conectar con la gente, más allá de si se puede bailar o no protocolariamente. Desde Enero hemos podido tocar bastante y estoy muy agradecido por eso. Creo que hay muy buena proyección a futuro. De hecho me encantaría poder viajar con este proyecto y llevar nuestra música a otros países. Actualmente nos encontramos bastante activos tocando y por otra parte estamos comenzando el proceso de pre-producción de nuestro primer álbum. También planificando un video de un live set con invitados y algunas presentaciones especiales en vivo.
Candy Flux es un híbrido versátil que no se queda en la comodidad, sino que apuesta al movimiento constante, lo que invita a imaginarlos (y esperemos que se de pronto) en un escenario sin pandemia. Por el momento para quienes no lo conocen, les dejamos su primer live set grabado, disponible en YouTube.